Salvador Caballero (1943-2006) - Cadaqués

Pictura subastas presenta esta magnífica obra de arte de Salvador Caballero en la que se ve representado un precioso paisaje de Cadaqués. Se ve una cualidad pictórica muy destacable en la obra. Obra muy destacada del pintor y exclusiva.

· Las medidas de esta obra con marco son: 43x48x5 cm.
· Las medidas de esta obra sin marco son: 20,5x25 cm.
· Se trata de un óleo sobre tela firmado a mano por el pintor en el margen inferior derecho, Salvador Caballero.
· Esta pieza se encuentra en excelente estado.

La obra se vende con precioso marco (incluido en la subasta como regalo).

Procede de una colección privada de Girona.

El cuadro será perfectamente embalado por un profesional de IVEX y enviado por Correos o GLS con su código de seguimiento único. Envíos a todo el mundo.

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Este cuadro de Salvador Caballero captura una escena costera serena y pintoresca, con el pueblo de Cadaqués en el fondo. En primer plano, se encuentra una barca de pesca varada en la orilla, pintada en tonos verdes y rojos. La barca está cargada con redes y otros utensilios de pesca, y parece estar anclada con cuerdas que la aseguran al suelo. El agua del mar se muestra en varios tonos de verde y azul, con pequeñas olas que rompen suavemente en la orilla. La textura del agua está representada con detalle, capturando el movimiento y la transparencia del mar. La orilla, cubierta de arena y piedras, muestra un contraste de colores terrosos que se mezclan con los reflejos del agua.
Al fondo, el pueblo se extiende a lo largo de la costa, con casas de fachadas blancas y techos de tejas rojas. La arquitectura típica mediterránea se destaca, con edificios agrupados que descienden hacia el mar, creando una sensación de comunidad y proximidad. En el centro del pueblo, su característica iglesia con una torre se eleva sobre el resto de las construcciones, añadiendo un punto focal a la composición.
Detrás del pueblo, se pueden ver colinas y montañas pintadas en tonos oscuros de verde y azul, sugiriendo una vegetación densa y una atmósfera tranquila y protegida. El cielo, parcialmente nublado, está pintado en tonos suaves de gris y azul, lo que sugiere un clima templado y posiblemente un día nublado.
En conjunto, el cuadro transmite una sensación de calma y belleza natural, capturando la esencia de un pequeño pueblo costero mediterráneo y su relación íntima con el mar. La atención al detalle y la elección de colores crean una escena vívida y evocadora que invita al espectador a sumergirse en la tranquilidad y el encanto de este lugar costero.