Pictura subastas presenta esta magnífica obra de arte de Miquel Duran i Font en la que se ve representado un precioso bodegón. Se ve una cualidad pictórica muy destacable en la obra. Obra muy exclusiva del pintor. · Las medidas de esta obra con marco son: 37,5x32x3 cm. · Las medidas de esta obra sin marco son: 22,5x18 cm. · Se trata de un óleo sobre tabla firmado por el pintor en el margen inferior derecho, Duran Font. · Esta pieza se encuentra en excelente estado. La obra se vende con precioso marco (incluido en la subasta como regalo). Procede de una colección privada de Girona. El cuadro será perfectamente embalado por un profesional de IVEX y enviado por Correos o GLS con su código de seguimiento único. Envíos a todo el mundo. ------------------------------------------------------------------ Este cuadro de Ramón Durán i Font es una pieza inusual dentro de su obra, ya que generalmente se dedica a pintar paisajes. La obra muestra un vibrante arreglo floral en un jarrón de cerámica. El jarrón está colocado sobre una superficie plana que refleja ligeramente los colores del mismo, sugiriendo una textura suave y brillante. El arreglo floral es exuberante y lleno de vida, compuesto por una gran variedad de flores de diferentes formas y colores. Se pueden ver flores blancas, amarillas, naranjas, rojas, lilas y azules, cada una representada con detalles meticulosos y pinceladas que capturan la delicadeza y diversidad de los pétalos. Las flores están dispuestas de manera que parecen desbordar del jarrón, creando una sensación de abundancia y naturalidad. El fondo del cuadro es neutro y difuso, con tonos suaves que no distraen la atención del espectador del vibrante ramo de flores. Las pinceladas en el fondo son sutiles y proporcionan una ligera textura, que ayuda a destacar aún más el arreglo floral. El jarrón, de un tono cálido y metálico, refleja algunos de los colores de las flores, integrando los elementos de la composición y proporcionando un punto focal central. La luz que incide sobre el jarrón y las flores crea reflejos y sombras suaves, añadiendo profundidad y realismo a la escena. En conjunto, este cuadro, aunque diferente de su temática habitual de paisajes, demuestra la habilidad de Ramón Durán i Font para capturar la belleza de la naturaleza, esta vez en forma de un delicado y colorido ramo de flores.