René Sautin (1881-1968) - La Fontaine Sainte Clotilde - Dans les près

René SAUTIN (1881-1968)

La Fontaine Sainte Clotilde - En los prados

Boceto extraído de los cuadernos de dibujo del artista.
Tinta y acuarela sobre papel doble cara.
Dimensiones de la obra: 21 x 27 cm
No firmada

Procedencia: colección particular, Les Andelys

Exposición: René Sautin, la exposición 'off', Les Andelys, octubre de 2018.
Reproducido en el catálogo, página 143.

Acuarela en perfecto estado.
No enmarcado

Esta pintura será incluida en el catálogo razonado de la obra del artista actualmente en preparación por Robert y Thierry Tuffier.

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René Sautin (1881-1968) nació en Montfort-sur-Risle en 1881.
Ingresa en los Beaux-Arts de Rouen en el taller de pintura del pintor P. Zacharie, luego en París en el taller Ferrier donde recibe consejos de Albert Lebourg, originario del mismo pueblo. Después ingresa en los Independientes con Signac y Luce.
Se casó en 1910 con Marthe, se estableció en Les Andelys en 1911 y entabló amistad con los hijos de Pissarro, Signac, Luce, Derain, Guillaumin, Lebasque, Bigot y Gernez, quienes se reunían en Les Andelys para pintar a orillas del Sena.
Impregnado de su tierra normanda, René Sautin será principalmente un paisajista. Hacia los años 1923, abandona la factura impresionista por un fauvismo tranquilo y razonado.
El pintor, habiendo encontrado el equilibrio en sus medios de expresión a partir de 1925, alcanzará su plenitud en los años 50. Es uno de los pocos pintores normandos en describir sus paisajes de una manera tan personal por su potencia, una cierta violencia controlada, una gran sensibilidad.
Hombre orgulloso, distinguido, muy culto, sufrió mucho por no ser entendido en su tiempo y lamentó ese aislamiento: «Mi vida ha sido a menudo dura y difícil…»
René Sautin nació en el mismo pueblo que el famoso pintor Albert Lebourg, en Montfort sur Risle. Pero es en Les Andelys donde pasará la mayor parte de su existencia.
Después de estudios primarios y secundarios en Montfort sur Risle y Pont-Audemer, René Sautin se dirigió inmediatamente hacia el dibujo: «Tras terminar mis estudios, equipado con una formación clásica, ingresé en la Escuela de Bellas Artes de Rouen en el taller del pintor Philippe Zacharie, maestro distinguido para quien el dibujo era un metal precioso. Luego, me fui a París, donde pasé un año en el taller Ferrier… y me lancé a la pintura con algunos buenos amigos y siguiendo los consejos del pintor Albert Lebourg.»
René Sautin abandonará la capital en 1911 para establecerse en los Andelys con su esposa Marthe.
La primera época de su obra está muy influenciada por Albert Lebourg, pero muy pronto su temperamento lo lleva hacia una pintura fauvista con colores tranquilos y razonados. Él mismo decía de su pintura: «Pintar, en esencia, es extender masa y no frotar. Partiendo de ahí, pinto espeso en pasta plena, sin frotis, cada toque siendo definitivo. Nunca vuelvo sobre un tono una vez que la marca está puesta. Esto da una gran potencia a mi pintura y mucho carácter. ¡Qué diablo! La naturaleza está afirmada. Lo que hace la belleza de un tono es su color audaz y rico. Todo el arte de pintar reside en hacer o interpretar como uno siente, como uno ve, todo lo demás es snobismo. Pintar es exteriorizar su temperamento. Es una interpretación de su pensamiento que pasa a otros.
El período de la Segunda Guerra Mundial conmueve profundamente al artista, ya que sin duda René Sautin es un verdadero amante de los Andelys. No deja de pintar el Sena, los muelles de Petit-Andely y el Château Gaillard. Pintar muy a menudo en los mismos lugares, pero cada vez crea una obra nueva.

El 8 de junio de 1940, los alemanes bombardean la ciudad de Andelys. Entonces se descubre una ciudad destruida en un noventa por ciento. Las iglesias han sido salvadas, así como algunas casas, pero todo el centro de la ciudad ha desaparecido bajo el bombardeo de bombas explosivas e incendiarias.
Durante este período, los artistas pierden el gusto por pintar. Sin embargo, René Sautin hizo, al día siguiente de los bombardeos, una serie de acuarelas, como si quisiera conservar un testimonio, para las futuras generaciones, de la visión apocalíptica de la ciudad.

Desde entonces, su obra cambia. Su dibujo es más marcado, delineado en negro.
En el Sena, las barcazas llevan el pabellón tricolor. En los años 50, René Sautin continuó esta tendencia a destacar en su dibujo. Desafortunadamente, poco a poco perdió la vista. El artista compensó su pérdida de visión con colores cada vez más violentos y vivos. Dejó de pintar definitivamente en 1964, cuatro años antes de su fallecimiento.