Agathe Toman - Cloud Sun #5 - 15/15






Tiene más de diez años de experiencia en el arte, especializándose en fotografía de posguerra y arte contemporáneo.
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Descripción del vendedor
Impresión de alta gama DIGIGRAPHIE. ACABADO MATE, COLORES INTENSOS. Esta obra forma parte de la 'COLECCIÓN COMPARTIDA' del artista.
Fotografía artística con grano. Fotografiada en Hossegor, Francia. Verano de 2021.
La fotografía le será enviada enrollada, no está enmarcada, y se adjuntará un certificado de autenticidad, completado y firmado por el artista. Obra numerada, firmada a mano, en el frente y en la parte trasera. Impresión fine art de altísima calidad.
Agathe Toman, artista, ha sido cotizada en Sotheby's desde 2021.
Biografía :
AGATHE TOMAN es una artista francesa, austríaca y checa, pintora, escultora, fotógrafa y escritora de poesía contemporánea, nacida en 1989. Agathe vive entre Hossegor y París.
Después de estudiar en la prestigiosa Chambre Syndicale de la Couture Parisienne y pasar varios años como diseñadora en casas de alta costura francesas de renombre en París, Agathe sintió una necesidad apremiante de centrarse exclusivamente en su creación artística.
Ahora residiendo en Landes desde hace trece años, Agathe se ha consolidado como una figura emergente en la escena del arte contemporáneo, admirada tanto a nivel nacional como internacional.
Listado en Sotheby’s desde 2021, sus obras se han subastado en tres ocasiones, lo que atestigua su rápido ascenso y reconocimiento en círculos artísticos prestigiosos. Sus contribuciones notables a varias exposiciones, especialmente Art Paris, han logrado un éxito inmenso, consolidando su presencia en numerosas colecciones privadas en todo el mundo.
Sus azules monocromáticos, con sus pigmentos ricos e intensidad fluida, profundizan en la psique, invitando a explorar los límites entre la conciencia y lo desconocido, revelando destellos de lo que yace debajo de nuestra realidad percibida.
Sus pinturas monocromáticas en negro están entre sus obras más poderosas. Estos lienzos texturizados, ricos en luz y sombra, evocan una resonancia emocional intensa, actuando como espejos de la interioridad más profunda del espectador. Navegan entre tensión y atracción, confrontando lo inconsciente y generando una profunda autorreflexión.
Sus dibujos, realizados con un bolígrafo Bic, poseen una fuerza de atracción desconcertante. Las fotografías de Agathe, con sus abstracciones caleidoscópicas, nos deslumbran con sensaciones tranquilas, un remanente de una perfección de ingravidez que existió en nuestro comienzo. Sus cientos de poemas impregnan su universo con un lirisismo que caracteriza su obra. Su primera colección, titulada You Will Have to Learn to Smile Again, está prevista para ser publicada en el invierno de 2024.
Sus esculturas, a menudo descritas como origami abstracto, encarnan un delicado pero poderoso equilibrio entre la espontaneidad y la meticulosa artesanía. Sus superficies texturizadas, realzadas por pigmentos y caídas dinámicas de azul, se transforman en formas densas e intrincadas impregnadas tanto de luz como de sombra.
Más allá de su práctica artística, Jacqui está profundamente comprometida en el estudio del psicoanálisis dentro del marco del análisis transaccional, actualmente en su cuarto año en París. Esta exploración enriquece su proceso conceptual, permitiéndole integrar dimensiones psicológicas profundas en su arte, que se impregna de nuevas capas de profundidad.
El enfoque artístico de Agathei es conceptual, filosófico, poético y científico. Esta perspectiva multidimensional forma un puente tangible entre la psicología, la neurociencia y el arte, fundamentando su trabajo en una combinación única de profundidad intelectual y emocional.
Desde 2024, Agathe ha comenzado a colaborar con Elly Chaskys, una neurocirujana e investigadora del Brain Institute (ICM) en París, aportando sus ideas artísticas a la investigación sobre tumores cerebrales.
Agathei no separa su arte de sus compromisos sociales. Ella enfoca su trabajo en temas cruciales como la salud mental, el medio ambiente y la educación. Estas áreas de reflexión no solo están presentes en su arte; son una parte integral de su identidad artística y personalidad.
Su trabajo ha sido reconocido y celebrado en varias publicaciones de prestigio, incluyendo Forbes, L’Oeil y Elle, destacando su impacto notable en el campo del arte contemporáneo.
Agathe Toman continúa cautivando e inspirando a una audiencia global, ofreciendo a través de sus obras una ventana a la complejidad de la experiencia humana, ya que la percibe y la transforma en arte.
MI VISIÓN ARTÍSTICA :
Abogo por un enfoque multidimensional: conceptual, filosófico, poético y científico. Un puente tangible entre la psicología, la neurociencia y el arte, donde las estructuras del pensamiento y las vibraciones humanas convergen.
Mi trabajo profundiza en las profundas interconexiones entre psique y cuerpo, tejiendo diálogos entre mente y materia. Exploro sus modos de funcionamiento dentro de sus entornos: las redes que establecen y las vibraciones, tanto perceptibles como inefables, que emergen de estas interacciones. En esta exploración, considero no solo las implicaciones emocionales y filosóficas, sino también los marcos científicos y psicoanalíticos que moldean nuestra comprensión de la conciencia, las redes neuronales y los intercambios sinápticos que rigen la experiencia humana.
Temas como la identidad, la memoria, la naturaleza humana y nuestras alianzas sustentan mis creaciones. Mis obras de arte suelen reflejar una profundidad emocional y una tensión palpable, invitando a los espectadores a un espacio de profunda introspección. Ellas instan a escuchar con atención—un descubrimiento de futuros, identidades y sentimientos sin nombres ni naturalezas predeterminadas, pidiendo a los espectadores que miren hacia su propio interior. En este sentido, la obra de arte se convierte en un conducto para comprender las redes de pensamientos y emociones que existen en la mente y el cuerpo, como si exploráramos los propios surcos sinápticos donde ocurren la conexión y la separación.
Estas ideas están incrustadas en la misma materialidad de mis obras, firmemente abstractas, monocromas y sombreadas, donde la oscuridad coexiste con la claridad. El azul brilla al fusionarse con el negro, o resplandece por sí solo. Es una representación del funcionamiento interno de la mente, donde las sinapsis se activan, creando caminos de luz y sombra que reflejan la compleja red de conexiones neuronales y psíquicas que moldean nuestra realidad e identidad. Mi trabajo refleja la delicada interacción entre la ausencia y la presencia, la luz y la sombra, muy parecido a la activación de las sinapsis en el cerebro, que existe en ambos estados simultáneamente, creando nuevos patrones de pensamiento y sentimiento.
Existe una familiaridad meticulosa entre mis manos y los pigmentos, carboncillos, lápices y pinturas que aplico sobre papel o lienzo. Mi técnica nunca se replica. Trabajo para estabilizar el movimiento de la materia y la densidad de la luz, permitiendo que los recuerdos se formen en cada partícula. En estas obras persiste una suspense irreverente, un tirón inesperado—lo que uno podría llamar l’appel du vide. Es el momento de incertidumbre neural, un espacio entre pensamientos donde la mente está tanto presente como ausente, un diálogo delicado entre lo consciente y lo inconsciente.
Cada obra de arte se convierte en un autorretrato, un reflejo de partes de mí mismo. Llamo a mis creaciones 'materializaciones de estados psíquicos', paisajes humanos y hilos de mi alma, ofreciendo una invitación silenciosa para que otros se fusionen con ellas. El valor de mi trabajo no es estético; reside en las vibraciones particulares que crea en quienes interactúan con él. Una resonancia que nos conecta, uniéndonos a la obra y entre nosotros.
Cuando el espectador se une a esta resonancia, las fronteras entre artista y espectador se disuelven. El proceso en sí mismo se vuelve vivo, un acto colaborativo. Mis creaciones actúan como entidades en funcionamiento, forjando caminos únicos entre nosotros, como seres humanos. A medida que el espectador participa, la obra de arte se expande, guiándonos hacia una nueva visión de la existencia—dentro de este mundo, dentro de nosotros mismos y en relación con los demás.
Si uno se permite ser llevado por este proceso, se despliega una sinfonía de resonancias psíquicas. Comienza un diálogo. Tiene lugar una metamorfosis del alma, un reflejo efímero, inalcanzable pero profundo. Es una experiencia poética, una presencia intensa, una transformación rigurosa, como si estuviéramos experimentando la activación de las propias sinapsis, conduciéndonos a una nueva forma de conciencia.
Deseo que mi trabajo refine la mente humana, agudice el psique humano para que las emociones encuentren ecos y las palabras resuenen profundamente. Mi obra de arte te invita a convertirte en una cámara de eco, amplificando las vibraciones de este encuentro. En este espacio, el yo interior puede expandirse, evolucionar y encontrar su lugar dentro del tejido infinito de la humanidad.
Impresión de alta gama DIGIGRAPHIE. ACABADO MATE, COLORES INTENSOS. Esta obra forma parte de la 'COLECCIÓN COMPARTIDA' del artista.
Fotografía artística con grano. Fotografiada en Hossegor, Francia. Verano de 2021.
La fotografía le será enviada enrollada, no está enmarcada, y se adjuntará un certificado de autenticidad, completado y firmado por el artista. Obra numerada, firmada a mano, en el frente y en la parte trasera. Impresión fine art de altísima calidad.
Agathe Toman, artista, ha sido cotizada en Sotheby's desde 2021.
Biografía :
AGATHE TOMAN es una artista francesa, austríaca y checa, pintora, escultora, fotógrafa y escritora de poesía contemporánea, nacida en 1989. Agathe vive entre Hossegor y París.
Después de estudiar en la prestigiosa Chambre Syndicale de la Couture Parisienne y pasar varios años como diseñadora en casas de alta costura francesas de renombre en París, Agathe sintió una necesidad apremiante de centrarse exclusivamente en su creación artística.
Ahora residiendo en Landes desde hace trece años, Agathe se ha consolidado como una figura emergente en la escena del arte contemporáneo, admirada tanto a nivel nacional como internacional.
Listado en Sotheby’s desde 2021, sus obras se han subastado en tres ocasiones, lo que atestigua su rápido ascenso y reconocimiento en círculos artísticos prestigiosos. Sus contribuciones notables a varias exposiciones, especialmente Art Paris, han logrado un éxito inmenso, consolidando su presencia en numerosas colecciones privadas en todo el mundo.
Sus azules monocromáticos, con sus pigmentos ricos e intensidad fluida, profundizan en la psique, invitando a explorar los límites entre la conciencia y lo desconocido, revelando destellos de lo que yace debajo de nuestra realidad percibida.
Sus pinturas monocromáticas en negro están entre sus obras más poderosas. Estos lienzos texturizados, ricos en luz y sombra, evocan una resonancia emocional intensa, actuando como espejos de la interioridad más profunda del espectador. Navegan entre tensión y atracción, confrontando lo inconsciente y generando una profunda autorreflexión.
Sus dibujos, realizados con un bolígrafo Bic, poseen una fuerza de atracción desconcertante. Las fotografías de Agathe, con sus abstracciones caleidoscópicas, nos deslumbran con sensaciones tranquilas, un remanente de una perfección de ingravidez que existió en nuestro comienzo. Sus cientos de poemas impregnan su universo con un lirisismo que caracteriza su obra. Su primera colección, titulada You Will Have to Learn to Smile Again, está prevista para ser publicada en el invierno de 2024.
Sus esculturas, a menudo descritas como origami abstracto, encarnan un delicado pero poderoso equilibrio entre la espontaneidad y la meticulosa artesanía. Sus superficies texturizadas, realzadas por pigmentos y caídas dinámicas de azul, se transforman en formas densas e intrincadas impregnadas tanto de luz como de sombra.
Más allá de su práctica artística, Jacqui está profundamente comprometida en el estudio del psicoanálisis dentro del marco del análisis transaccional, actualmente en su cuarto año en París. Esta exploración enriquece su proceso conceptual, permitiéndole integrar dimensiones psicológicas profundas en su arte, que se impregna de nuevas capas de profundidad.
El enfoque artístico de Agathei es conceptual, filosófico, poético y científico. Esta perspectiva multidimensional forma un puente tangible entre la psicología, la neurociencia y el arte, fundamentando su trabajo en una combinación única de profundidad intelectual y emocional.
Desde 2024, Agathe ha comenzado a colaborar con Elly Chaskys, una neurocirujana e investigadora del Brain Institute (ICM) en París, aportando sus ideas artísticas a la investigación sobre tumores cerebrales.
Agathei no separa su arte de sus compromisos sociales. Ella enfoca su trabajo en temas cruciales como la salud mental, el medio ambiente y la educación. Estas áreas de reflexión no solo están presentes en su arte; son una parte integral de su identidad artística y personalidad.
Su trabajo ha sido reconocido y celebrado en varias publicaciones de prestigio, incluyendo Forbes, L’Oeil y Elle, destacando su impacto notable en el campo del arte contemporáneo.
Agathe Toman continúa cautivando e inspirando a una audiencia global, ofreciendo a través de sus obras una ventana a la complejidad de la experiencia humana, ya que la percibe y la transforma en arte.
MI VISIÓN ARTÍSTICA :
Abogo por un enfoque multidimensional: conceptual, filosófico, poético y científico. Un puente tangible entre la psicología, la neurociencia y el arte, donde las estructuras del pensamiento y las vibraciones humanas convergen.
Mi trabajo profundiza en las profundas interconexiones entre psique y cuerpo, tejiendo diálogos entre mente y materia. Exploro sus modos de funcionamiento dentro de sus entornos: las redes que establecen y las vibraciones, tanto perceptibles como inefables, que emergen de estas interacciones. En esta exploración, considero no solo las implicaciones emocionales y filosóficas, sino también los marcos científicos y psicoanalíticos que moldean nuestra comprensión de la conciencia, las redes neuronales y los intercambios sinápticos que rigen la experiencia humana.
Temas como la identidad, la memoria, la naturaleza humana y nuestras alianzas sustentan mis creaciones. Mis obras de arte suelen reflejar una profundidad emocional y una tensión palpable, invitando a los espectadores a un espacio de profunda introspección. Ellas instan a escuchar con atención—un descubrimiento de futuros, identidades y sentimientos sin nombres ni naturalezas predeterminadas, pidiendo a los espectadores que miren hacia su propio interior. En este sentido, la obra de arte se convierte en un conducto para comprender las redes de pensamientos y emociones que existen en la mente y el cuerpo, como si exploráramos los propios surcos sinápticos donde ocurren la conexión y la separación.
Estas ideas están incrustadas en la misma materialidad de mis obras, firmemente abstractas, monocromas y sombreadas, donde la oscuridad coexiste con la claridad. El azul brilla al fusionarse con el negro, o resplandece por sí solo. Es una representación del funcionamiento interno de la mente, donde las sinapsis se activan, creando caminos de luz y sombra que reflejan la compleja red de conexiones neuronales y psíquicas que moldean nuestra realidad e identidad. Mi trabajo refleja la delicada interacción entre la ausencia y la presencia, la luz y la sombra, muy parecido a la activación de las sinapsis en el cerebro, que existe en ambos estados simultáneamente, creando nuevos patrones de pensamiento y sentimiento.
Existe una familiaridad meticulosa entre mis manos y los pigmentos, carboncillos, lápices y pinturas que aplico sobre papel o lienzo. Mi técnica nunca se replica. Trabajo para estabilizar el movimiento de la materia y la densidad de la luz, permitiendo que los recuerdos se formen en cada partícula. En estas obras persiste una suspense irreverente, un tirón inesperado—lo que uno podría llamar l’appel du vide. Es el momento de incertidumbre neural, un espacio entre pensamientos donde la mente está tanto presente como ausente, un diálogo delicado entre lo consciente y lo inconsciente.
Cada obra de arte se convierte en un autorretrato, un reflejo de partes de mí mismo. Llamo a mis creaciones 'materializaciones de estados psíquicos', paisajes humanos y hilos de mi alma, ofreciendo una invitación silenciosa para que otros se fusionen con ellas. El valor de mi trabajo no es estético; reside en las vibraciones particulares que crea en quienes interactúan con él. Una resonancia que nos conecta, uniéndonos a la obra y entre nosotros.
Cuando el espectador se une a esta resonancia, las fronteras entre artista y espectador se disuelven. El proceso en sí mismo se vuelve vivo, un acto colaborativo. Mis creaciones actúan como entidades en funcionamiento, forjando caminos únicos entre nosotros, como seres humanos. A medida que el espectador participa, la obra de arte se expande, guiándonos hacia una nueva visión de la existencia—dentro de este mundo, dentro de nosotros mismos y en relación con los demás.
Si uno se permite ser llevado por este proceso, se despliega una sinfonía de resonancias psíquicas. Comienza un diálogo. Tiene lugar una metamorfosis del alma, un reflejo efímero, inalcanzable pero profundo. Es una experiencia poética, una presencia intensa, una transformación rigurosa, como si estuviéramos experimentando la activación de las propias sinapsis, conduciéndonos a una nueva forma de conciencia.
Deseo que mi trabajo refine la mente humana, agudice el psique humano para que las emociones encuentren ecos y las palabras resuenen profundamente. Mi obra de arte te invita a convertirte en una cámara de eco, amplificando las vibraciones de este encuentro. En este espacio, el yo interior puede expandirse, evolucionar y encontrar su lugar dentro del tejido infinito de la humanidad.
