Gérard Desgranges (1919-2006) - Cantal





Añádelo a tus favoritos para recibir una alerta cuando empiece la subasta.

Graduada como subastadora francesa y trabajó en el departamento de tasación de Sotheby’s París.
Protección del Comprador de Catawiki
Tu pago está protegido con nosotros hasta que recibas tu objeto.Ver detalles
Trustpilot 4.4 | 122910 valoraciones
Valoración Excelente en Trustpilot.
Descripción del vendedor
Gérard DESGRANGES (1919-2006)
Cantal
Óleo sobre lienzo
46 x 55 centímetros
Firmada en la esquina inferior derecha
Cuadro en perfecto estado.
sin marco
Procedencia: familia del artista.
Obra original entregada con factura y certificado de autenticidad.
Envío rápido, cuidado y asegurado.
Compra con total confianza!
Gérard Desgranges (1919–2006) pertenece a esa generación de pintores franceses cuya obra, profundamente sincera, sigue tocando por su justeza y sensibilidad. Formado en la observación atenta de la realidad, desarrolla una pintura luminosa, equilibrada, donde cada toque parece buscar captar lo esencial: una atmósfera, un silencio, un destello de vida.
Sus paisajes, sus escenas íntimas y sus composiciones más estructuradas reflejan un dominio seguro del dibujo y una paleta sutil, siempre al servicio de la emoción. En Desgranges, nada es demostrativo: todo son matices, respiración y profundidad. Sus cuadros seducen por su capacidad de crear un vínculo inmediato con el espectador, como si abrieran una ventana a un mundo apacible e atemporal.
Adquirir una obra de Gérard Desgranges es elegir una pintura auténtica, duradera, y la firma de un artista cuya sensibilidad sigue resonando fuertemente entre los coleccionistas.
El vendedor y su historia
Gérard DESGRANGES (1919-2006)
Cantal
Óleo sobre lienzo
46 x 55 centímetros
Firmada en la esquina inferior derecha
Cuadro en perfecto estado.
sin marco
Procedencia: familia del artista.
Obra original entregada con factura y certificado de autenticidad.
Envío rápido, cuidado y asegurado.
Compra con total confianza!
Gérard Desgranges (1919–2006) pertenece a esa generación de pintores franceses cuya obra, profundamente sincera, sigue tocando por su justeza y sensibilidad. Formado en la observación atenta de la realidad, desarrolla una pintura luminosa, equilibrada, donde cada toque parece buscar captar lo esencial: una atmósfera, un silencio, un destello de vida.
Sus paisajes, sus escenas íntimas y sus composiciones más estructuradas reflejan un dominio seguro del dibujo y una paleta sutil, siempre al servicio de la emoción. En Desgranges, nada es demostrativo: todo son matices, respiración y profundidad. Sus cuadros seducen por su capacidad de crear un vínculo inmediato con el espectador, como si abrieran una ventana a un mundo apacible e atemporal.
Adquirir una obra de Gérard Desgranges es elegir una pintura auténtica, duradera, y la firma de un artista cuya sensibilidad sigue resonando fuertemente entre los coleccionistas.
