Antoni Rotger Vilar (1925–2000) - Lyrical study of a nude





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Estudio lírico de un desnudo, óleo sobre tabla, c. 1960, España, vendido con marco.
Descripción del vendedor
ESTUDIO LÍRICO DE DESNUDO
Estilo: Figuración lírica – Postimpresionismo tardío
Escuela pictórica: Escuela catalana de posguerra / Figuración moderna mediterránea
1. FICHA TÉCNICA
Autor: Antoni Rotger Vilar (1925–2000)
Cronología: c. 1960–1970
Técnica: Óleo sobre tabla
Medidas: 61 × 48 cm
Medidas con marco: 76 × 63 cm
Firma: Firmado en el ángulo inferior derecho
Estado de conservación: Bueno, con pátina natural del tiempo
Marco: Marco dorado de calidad, de líneas sobrias y proporción equilibrada, acorde a la estética de mediados del siglo XX y perfectamente integrado en la obra
2. DESCRIPCIÓN COMPOSITIVA E ICONOGRÁFICA
La obra representa una figura masculina desnuda, captada en un estado de introspección y tránsito emocional. El cuerpo aparece deliberadamente desmaterializado, construido a través de veladuras y pinceladas sueltas en una gama de azules, blancos y ocres claros, que diluyen los contornos y funden figura y atmósfera.
La composición renuncia a la narración concreta para centrarse en la sensación y el clima emocional, otorgando al desnudo un carácter poético y espiritual. La anatomía, sugerida más que descrita, refuerza una lectura íntima, silenciosa y profundamente humana, donde la pintura se convierte en un espacio de contemplación.
3. ESTILO, ESCUELA Y VALORACIÓN COMPARATIVA
Antoni Rotger Vilar se inscribe con claridad en la figuración moderna catalana de posguerra, dentro de una línea postimpresionista lírica, donde el interés no reside en la descripción académica sino en la expresión emocional y la atmósfera pictórica.
Su lenguaje muestra afinidades con autores como Joaquim Sunyer, ciertos periodos de Isidre Nonell en su vertiente más intimista, y con la figuración poética de Mariano Andreu o Maurice Denis, salvando las distancias cronológicas. Frente al dramatismo barroco, la obra propone una interiorización moderna del cuerpo, donde la luz sustituye al claroscuro y la emoción al relato.
Se trata de una pieza elegante, honesta y representativa, con notable interés para coleccionistas de figuración mediterránea del siglo XX, destacando por su sensibilidad, equilibrio cromático y refinamiento técnico.
El vendedor y su historia
ESTUDIO LÍRICO DE DESNUDO
Estilo: Figuración lírica – Postimpresionismo tardío
Escuela pictórica: Escuela catalana de posguerra / Figuración moderna mediterránea
1. FICHA TÉCNICA
Autor: Antoni Rotger Vilar (1925–2000)
Cronología: c. 1960–1970
Técnica: Óleo sobre tabla
Medidas: 61 × 48 cm
Medidas con marco: 76 × 63 cm
Firma: Firmado en el ángulo inferior derecho
Estado de conservación: Bueno, con pátina natural del tiempo
Marco: Marco dorado de calidad, de líneas sobrias y proporción equilibrada, acorde a la estética de mediados del siglo XX y perfectamente integrado en la obra
2. DESCRIPCIÓN COMPOSITIVA E ICONOGRÁFICA
La obra representa una figura masculina desnuda, captada en un estado de introspección y tránsito emocional. El cuerpo aparece deliberadamente desmaterializado, construido a través de veladuras y pinceladas sueltas en una gama de azules, blancos y ocres claros, que diluyen los contornos y funden figura y atmósfera.
La composición renuncia a la narración concreta para centrarse en la sensación y el clima emocional, otorgando al desnudo un carácter poético y espiritual. La anatomía, sugerida más que descrita, refuerza una lectura íntima, silenciosa y profundamente humana, donde la pintura se convierte en un espacio de contemplación.
3. ESTILO, ESCUELA Y VALORACIÓN COMPARATIVA
Antoni Rotger Vilar se inscribe con claridad en la figuración moderna catalana de posguerra, dentro de una línea postimpresionista lírica, donde el interés no reside en la descripción académica sino en la expresión emocional y la atmósfera pictórica.
Su lenguaje muestra afinidades con autores como Joaquim Sunyer, ciertos periodos de Isidre Nonell en su vertiente más intimista, y con la figuración poética de Mariano Andreu o Maurice Denis, salvando las distancias cronológicas. Frente al dramatismo barroco, la obra propone una interiorización moderna del cuerpo, donde la luz sustituye al claroscuro y la emoción al relato.
Se trata de una pieza elegante, honesta y representativa, con notable interés para coleccionistas de figuración mediterránea del siglo XX, destacando por su sensibilidad, equilibrio cromático y refinamiento técnico.

