Rudolf Jordan (1810-1885) - Moeder met kind

Se trata de una hermosa pintura del artista alemán Rudolf Jordan 1810-1887.
Esta hermosa obra se encuentra en un estado muy bonito y está firmada con monograma en la esquina inferior izquierda y fechada en '58.
Un trabajo hermoso.
Sin lista, las medidas son 35 cm x 41 cm.
Rudolf Jordan
(1810 Berlín – 1887 Düsseldorf)
Retrato del artista Rudolf Jordan, después de Andreas Achenbach. Litografía. 24,4 x 19,9 cm. 1833.


Rudolf Jordan fue inicialmente entrenado como mozo de cuadra antes de dedicarse a la pintura a los diecinueve años, siguiendo el consejo de Wilhelm Wach. En 1833, comenzó a estudiar en la Academia de Düsseldorf, donde permaneció hasta 1840. Después de trabajar durante algunos años con Friedrich Wilhelm von Schadow y Karl Ferdinand Sohn, se estableció como artista independiente en 1848 en Düsseldorf y rápidamente se convirtió en uno de los representantes más respetados de la escuela de Düsseldorf. Su primera pintura de género, La familia del pescador (1832), y la Propuesta de matrimonio en Heligoland, realizada en 1834 durante sus años de estudiante en Düsseldorf, fueron recibidas con entusiasmo por el público en la Exposición de la Academia de Berlín. Estas obras establecieron estándares para un nuevo tipo de pintura de género en la que Jordan obtuvo éxitos notables: retratos etnográficos y anecdóticos de la vida de los pescadores, que observó en varios viajes a las costas de Holanda, Bélgica y el norte de Alemania. La fecha en esta litografía indica que fue realizada en enero de 1833, justo antes de que Jordan comenzara sus estudios en la Academia de Düsseldorf. El monograma en la esquina superior derecha también permite concluir que el retrato proviene de una pintura de Andreas Achenbach. Este asistió a la Academia de Düsseldorf diez años antes que Jordan y realizó un viaje de estudio por los Países Bajos con su padre en 1832/33. Los bocetos en los márgenes, que además de tres cabezas grotescas y un caballo muestran pescadores y sus barcos en la costa, revelan la predilección de ambos artistas por la pintura marítima. Curiosamente, esta es la tercera vez que se retrata al joven Rudolf Jordan fumando una pipa. Evidentemente, la impresionante pipa con barba era un atributo característico del joven estudiante de arte, que mira al espectador con una sonrisa confiada y traviesa, mientras delgadas nubes de humo escapan de sus labios.