Fossil Ammonite Douvilliceras sp. – Madagascar. - Fragmento de fósil - extraordinary fossil of the genus Douvillicera - 230 mm - 190 mm

Un extraordinario fósil del género Douvilliceras, hallado en las Formaciones Albianas de Madagascar, data de hace aproximadamente 110 millones de años. Este género de ammonites es conocido por su robusta concha, con costillas radiales que recorren toda su longitud, lo que le confiere al ejemplar una apariencia casi escultural. Douvilliceras pertenece a la familia Desmoceratidae y se distingue por sus complejas suturas profundamente incisas, claramente visibles en la parte fracturada del ejemplar.
Esta amonita ha sido pulida y abrillantada a mano, revelando una variedad de colores naturales: crema, gris, tonos ámbar y trazas de aragonito fosilizado, que, en su interior, muestra reflejos nacarados, a veces con matices rosados y verdes.
Particularmente fascinantes son las inclusiones metálicas naturales bien distribuidas por la superficie. Se trata de pirita o marcasita, formadas durante el proceso de fosilización, que emergen como manchas plateadas y reflectantes. Algunas porciones más compactas y brillantes podrían sugerir la presencia de galena u otros sulfuros metálicos. Estos detalles realzan el espécimen, convirtiéndolo en un interesante ejemplar de naturalia: fósiles que, más allá de su valor paleontológico, son verdaderas obras de arte geológico.
La porción fracturada revela una estructura interna excepcional, con distintivas cámaras septadas mineralizadas con calcedonia, cuarzo translúcido y calcita, creando una textura interna que evoca la geometría sagrada. Esta formación permite apreciar no solo la apariencia externa de la concha, sino también su extraordinaria arquitectura funcional, utilizada para la flotabilidad en los mares tropicales del Cretácico.
Este fósil encaja a la perfección en la categoría de naturalia, objetos extraordinarios creados por la naturaleza, codiciados por coleccionistas por su estética y rareza. Un ejemplar como este combina valor científico, belleza ornamental y rareza mineralógica, lo que lo hace ideal no solo para coleccionistas de fósiles, sino también para galerías de arte naturalista y entusiastas de la mineralogía antigua.