A. Della Valle (XX-XXI), da Carl Vilhelm Holsøe - Interno Danese (classico)





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Interno Danese (clásico), óleo sobre lienzo realizado en Italia por A. Della Valle (XX-XXI), homenaje a Carl Vilhelm Holsøe, periodo 2020+.
Descripción del vendedor
Interno Danese clásico (Omaggio a Carl Holsøe)
Artista: A. Della Valle
Técnica: óleo sobre tela
Dimensiones: 50 x 40 cm
Esta pintura de A. Della Valle es un homenaje evocador al maestro danés de interiores, Carl Holsøe (1863-1935), conocido por sus escenas domésticas tranquilas y luminosas. Aunque la obra se centra en un interior, la presencia dominante de pinturas colgadas, en particular una vibrante marina, introduce un contraste dinámico con la atmósfera, en su mayoría serena y recogida.
La escena está enmarcada en una esquina de una sala de estar, caracterizada por una composición rectilínea y un uso hábil de la luz natural, distintivo de la Escuela de Pintura Danesa. La fuente de luz, presumiblemente una ventana no visible directamente (o en parte a la derecha, cubierta por una cortina blanca y diáfana), inunda el ambiente, proyectando largas sombras definidas sobre el suelo de madera pulida, especialmente en primer plano.
La decoración, típica de un interior burgués, es sobria pero elegante.
A la izquierda: se distingue un fragmento de una silla o sillón en madera oscura con un revestimiento verde opaco.
Al centro: un pequeño cassettone o consola de tres cajones, también en madera oscura, que funciona como pedestal para una composición de objetos decorativos. Sobre él descansan una estatuilla en porcelana blanca o mármol (quizás un cupido) y un jarrón de latón o metal reflectante.
A la derecha: una planta en vaso con follaje denso y verde, colocada sobre un pedestal alto y refinado en metal dorado o latón, que equilibra la esquina, suavizando las líneas duras de la pared y de la ventana.
Un elemento que se desvía ligeramente de los cánones minimalistas de Holsøe son las pinturas colgadas, que añaden profundidad y color.
El cuadro dominante en el centro representa una escena marina dramática con acantilados rocosos y un mar agitado, iluminado por un cielo al atardecer o al amanecer. El oro del marco de este cuadro captura la luz, destacándolo como un 'cuadro en el cuadro'.
Pequeña escena idílica: bajo la marina, un cuadro más pequeño y oscuro presenta una escena al aire libre, quizás un paisaje idílico o un grupo de figuras, que contrasta con la potencia del mar superior.
A la izquierda: otros dos cuadros, uno de los cuales es una escena de paisaje florido y el otro un marco vacío o un espejo, contribuyen a estratificar la pared, interrumpida por la luz que cae oblicua.
La paleta de A. Della Valle se caracteriza por tonos cálidos de marrón, verde y azul, acentuados por el contraste entre la penumbra de los muebles y la luz casi cegadora que entra por la derecha. La alfombra en primer plano, con sus motivos rojos y marrones, aporta textura y calidez.
La obra logra capturar la serenidad y la intimidad de los interiores de Holsøe, donde la atención se desplaza de la acción humana hacia la contemplación del espacio, de la luz y de su interacción con los objetos y las obras de arte.
Interno Danese clásico (Omaggio a Carl Holsøe)
Artista: A. Della Valle
Técnica: óleo sobre tela
Dimensiones: 50 x 40 cm
Esta pintura de A. Della Valle es un homenaje evocador al maestro danés de interiores, Carl Holsøe (1863-1935), conocido por sus escenas domésticas tranquilas y luminosas. Aunque la obra se centra en un interior, la presencia dominante de pinturas colgadas, en particular una vibrante marina, introduce un contraste dinámico con la atmósfera, en su mayoría serena y recogida.
La escena está enmarcada en una esquina de una sala de estar, caracterizada por una composición rectilínea y un uso hábil de la luz natural, distintivo de la Escuela de Pintura Danesa. La fuente de luz, presumiblemente una ventana no visible directamente (o en parte a la derecha, cubierta por una cortina blanca y diáfana), inunda el ambiente, proyectando largas sombras definidas sobre el suelo de madera pulida, especialmente en primer plano.
La decoración, típica de un interior burgués, es sobria pero elegante.
A la izquierda: se distingue un fragmento de una silla o sillón en madera oscura con un revestimiento verde opaco.
Al centro: un pequeño cassettone o consola de tres cajones, también en madera oscura, que funciona como pedestal para una composición de objetos decorativos. Sobre él descansan una estatuilla en porcelana blanca o mármol (quizás un cupido) y un jarrón de latón o metal reflectante.
A la derecha: una planta en vaso con follaje denso y verde, colocada sobre un pedestal alto y refinado en metal dorado o latón, que equilibra la esquina, suavizando las líneas duras de la pared y de la ventana.
Un elemento que se desvía ligeramente de los cánones minimalistas de Holsøe son las pinturas colgadas, que añaden profundidad y color.
El cuadro dominante en el centro representa una escena marina dramática con acantilados rocosos y un mar agitado, iluminado por un cielo al atardecer o al amanecer. El oro del marco de este cuadro captura la luz, destacándolo como un 'cuadro en el cuadro'.
Pequeña escena idílica: bajo la marina, un cuadro más pequeño y oscuro presenta una escena al aire libre, quizás un paisaje idílico o un grupo de figuras, que contrasta con la potencia del mar superior.
A la izquierda: otros dos cuadros, uno de los cuales es una escena de paisaje florido y el otro un marco vacío o un espejo, contribuyen a estratificar la pared, interrumpida por la luz que cae oblicua.
La paleta de A. Della Valle se caracteriza por tonos cálidos de marrón, verde y azul, acentuados por el contraste entre la penumbra de los muebles y la luz casi cegadora que entra por la derecha. La alfombra en primer plano, con sus motivos rojos y marrones, aporta textura y calidez.
La obra logra capturar la serenidad y la intimidad de los interiores de Holsøe, donde la atención se desplaza de la acción humana hacia la contemplación del espacio, de la luz y de su interacción con los objetos y las obras de arte.

