Este espejo de estilo *neoclásico* es una pieza arquitectónica y decorativa que evoca la elegancia sobria y refinada propia de finales del siglo XVIII y principios del XIX. Su estructura está enmarcada por dos columnas laterales estriadas, que recuerdan los órdenes clásicos grecorromanos, aportando verticalidad y simetría al conjunto. En la parte superior, se alza un frontón decorativo con relieves de inspiración vegetal y motivos florales, propios del gusto ornamental de la Regencia, donde la influencia clásica se suaviza con detalles más delicados y decorativos. El uso de dorados y acentos en rojo en la talla refuerza el carácter aristocrático de la pieza, mientras que la base inferior, también moldurada, equilibra visualmente el diseño. Este espejo no solo refleja la imagen, sino también el espíritu de una época en la que el mobiliario era símbolo de cultura, orden y sofisticación. Ideal para interiores clásicos, aporta una presencia escénica que transforma cualquier espacio en un rincón de historia y distinción. Envío certificado y buen embalaje.