Andrea Imwiehe - Memory Room_Golden_03

Andrea Imwiehe, ganadora del premio de arte de la AOK Nordost, Berlín/Brandeburgo y becaria de la Künstlerhaus Lukas en Ahrenshoop, es graduada de la Kunstakademie HbK Braunschweig. Desde su juventud, se ha dedicado apasionadamente a la pintura y ahora vive y trabaja en un estudio en la antigua oficina postal imperial en el corazón de Berlín.

Sus pinturas acrílicas están inspiradas en su propia memoria, pero van más allá de ella. Su objetivo es crear una atmósfera a través de la pintura.
Sus obras de arte forman hoy parte de numerosas colecciones privadas y han sido exhibidas en galerías, museos y exposiciones de arte de renombre. https://artfacts.net/artist/andrea-imwiehe/383311

https://www.andrea-imwiehe.de/
Instagram: https://www.instagram.com/andreaimwiehe/

Andrea Imwiehe trabaja en una combinación de pintura acrílica y dibujo lineal, donde las líneas se cortan directamente en la pintura acrílica, formando así un relieve hundido.

La obra de arte en un vistazo:

Imagen de la serie «Memory Rooms» – impresiones de espacios y recuerdos en una pintura única.
- Combinación de pintura acrílica y dibujo lineal - estructura superficial única
- Pintado sobre fondo de madera de alta calidad, listo para colgar de inmediato
Firmado en la parte trasera, numerado y con todas las indicaciones de la imagen.
El envío se realiza en embalaje profesional con papel de seda y burbujas de aire.
Certificado de autenticidad incluido

Andrea Imwiehe es una arqueóloga de la memoria. Lo que ella maneja - los colores que elige, las líneas que traza y los motivos que selecciona - rodean este campo vago donde se almacenan lo perdido y lo pasado - ¡y los recrean! Porque la memoria no es un cajón en el que lo almacenado una vez allí pueda sacarse sin modificaciones, sino que cada acto de recordar es una reconstrucción recreada en el momento. Estas pinturas también están relacionadas con una intención de reconstrucción: indican un mundo perdido y cosas aisladas, cuya importancia se ha vuelto cuestionable, pero que son tratadas de una manera tan especial que no solo invitan a la artista, sino también a quienes las observan, a redescubrir su contexto perdido.
La pintora parte de recuerdos concretos propios y objetos que tienen un significado personal para ella, sin convertir estos en una mitología personal en la que los espectadores tendrían que sumergirse. Más bien, ella transforma los objetos a través de su extracción y de una presentación individual meticulosa y detallada, de modo que se vuelven ultra-personales y universales, evocando en nosotros experiencias e imágenes propias. Porque su contexto de vida no está estructurado; el lugar donde se encuentran estos campos temáticos, que flotan libremente y están ensamblados como collages en la superficie de la imagen, es completamente indeterminado.
Ellos flotan sobre una superficie homogénea de color, que consiste en tres o cuatro capas de color superpuestas, de las que en su parte inferior se ven franjas estrechas que rodean la imagen como un marco propio. Aquí también, encontramos una analogía con la memoria, en la que día tras día se forman nuevas capas. Nunca se puede ver el pasado en su totalidad, sino solo recuperarlo en partes.
Dra. Anette Naumann