Cosimo Privato (1899-1971) - Nudo Femminile - NO RESERVE






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Nudo Femminile – NO RESERVE, 1950–1960, Técnica mixta, Italia; vendido con marco.
Descripción del vendedor
Importante obra de colección
Cosimo Privato (1899-1971)
Nudo femenino
Ópera auténtica, firmada, con certificado de autenticidad
Boceto en papel a lápiz
COSIMO PRIVATO
Cosimo Privato (1899-1971) es uno de los pintores más válidos y originales de la 'vieja guardia' lagunare: aquella que alcanzó la fama a finales de los años veinte. Siempre vivió en Venecia: rara vez se alejaba de su ciudad. Fue el primero entre sus amigos y contemporáneos (Novati, Mori, Seibezzi, Ravenna, Dalla Zorza, Bergamini, etc.) en tener éxito.
En 1926 fue recibido en la Biennale, donde posteriormente participó en cada edición hasta 1938.
En 1930 fue el expositor más joven de la Bienal; en 1934 se le dedicó una amplia pared con siete obras. Expuso en la Opera Bevilacqua La Masa cada año desde 1920 hasta 1940.
Entre los Venti y Trenta asistía con frecuencia a exposiciones: basta citar la Quadriennale en Roma en 1935, la famosa Exposición de Pittsburgh (EE. UU.) en 1932, las exposiciones en Praga, Viena, Varsovia, Atenas y Sofía organizadas por la Biennale, la primera Exposición Internacional en Fiume en 1925; y además la internacional de Artes Decorativas en Monza, la Permanente en Milán, las Bienales de Milán, las Regionales de Padua y Vicenza. Realizó su primera exposición individual en la galería Celentano en Milán en 1930; le siguieron otras en Padua, Trieste, Bérgamo, Verona y Venecia (galería Sandri, 1941).
La de Milán (galería Mediolanum, 1946) fue su última exposición personal importante. Siguieron otras, pero pocas, en la posguerra, principalmente en Trieste.
Cada vez más retirado, participaba en alguna exposición colectiva ocasional. Después de su muerte, se organizaron algunos homenajes póstumos, el primero de los cuales fue en octubre de 1971 en Venecia, en la galería San Vidal.
Muchas de las obras realizadas por encargo de particulares, empezando por los cartones para la decoración en mosaico en la sala de recepciones del Palacio Real del Cairo. Mantuvo frecuentes contactos, siempre en los años veinte y treinta, pero también posteriormente, con comerciantes nacionales y extranjeros, que compraban sus obras. Sus cuadros fueron premiados varias veces en exposiciones oficiales y adquiridos.
Entre las adquisiciones figuran las del Rey en la Bienal de 1932, las del Ayuntamiento de Venecia y de otros organismos en las exposiciones de Bevilacqua La Masa en 1927, 1929, 1931 y 1932, las del Ministerio de Educación Pública para la Galería de Arte Moderno de Roma, las del Ayuntamiento de Bari, el Banco de Italia y la Caja de Ahorros de Venecia, así como de la Prefectura de Venecia. Muchos críticos han escrito sobre él, desde Ojetti a Damerini, de Nebbia a Pozzi, de Celentano a Passarella, de Perocco a Rizzi. Esta en Mestre es la primera retrospectiva de carácter antológico, además de ser la ocasión para la primera publicación verdadera y propia, más allá de los pocos dípticos y catálogos que nos quedan.
Con certificado de autenticidad conforme a la ley
La cornice viene adjunta como obsequio.
Envío asegurado
Embalaje de seguridad
El vendedor y su historia
Importante obra de colección
Cosimo Privato (1899-1971)
Nudo femenino
Ópera auténtica, firmada, con certificado de autenticidad
Boceto en papel a lápiz
COSIMO PRIVATO
Cosimo Privato (1899-1971) es uno de los pintores más válidos y originales de la 'vieja guardia' lagunare: aquella que alcanzó la fama a finales de los años veinte. Siempre vivió en Venecia: rara vez se alejaba de su ciudad. Fue el primero entre sus amigos y contemporáneos (Novati, Mori, Seibezzi, Ravenna, Dalla Zorza, Bergamini, etc.) en tener éxito.
En 1926 fue recibido en la Biennale, donde posteriormente participó en cada edición hasta 1938.
En 1930 fue el expositor más joven de la Bienal; en 1934 se le dedicó una amplia pared con siete obras. Expuso en la Opera Bevilacqua La Masa cada año desde 1920 hasta 1940.
Entre los Venti y Trenta asistía con frecuencia a exposiciones: basta citar la Quadriennale en Roma en 1935, la famosa Exposición de Pittsburgh (EE. UU.) en 1932, las exposiciones en Praga, Viena, Varsovia, Atenas y Sofía organizadas por la Biennale, la primera Exposición Internacional en Fiume en 1925; y además la internacional de Artes Decorativas en Monza, la Permanente en Milán, las Bienales de Milán, las Regionales de Padua y Vicenza. Realizó su primera exposición individual en la galería Celentano en Milán en 1930; le siguieron otras en Padua, Trieste, Bérgamo, Verona y Venecia (galería Sandri, 1941).
La de Milán (galería Mediolanum, 1946) fue su última exposición personal importante. Siguieron otras, pero pocas, en la posguerra, principalmente en Trieste.
Cada vez más retirado, participaba en alguna exposición colectiva ocasional. Después de su muerte, se organizaron algunos homenajes póstumos, el primero de los cuales fue en octubre de 1971 en Venecia, en la galería San Vidal.
Muchas de las obras realizadas por encargo de particulares, empezando por los cartones para la decoración en mosaico en la sala de recepciones del Palacio Real del Cairo. Mantuvo frecuentes contactos, siempre en los años veinte y treinta, pero también posteriormente, con comerciantes nacionales y extranjeros, que compraban sus obras. Sus cuadros fueron premiados varias veces en exposiciones oficiales y adquiridos.
Entre las adquisiciones figuran las del Rey en la Bienal de 1932, las del Ayuntamiento de Venecia y de otros organismos en las exposiciones de Bevilacqua La Masa en 1927, 1929, 1931 y 1932, las del Ministerio de Educación Pública para la Galería de Arte Moderno de Roma, las del Ayuntamiento de Bari, el Banco de Italia y la Caja de Ahorros de Venecia, así como de la Prefectura de Venecia. Muchos críticos han escrito sobre él, desde Ojetti a Damerini, de Nebbia a Pozzi, de Celentano a Passarella, de Perocco a Rizzi. Esta en Mestre es la primera retrospectiva de carácter antológico, además de ser la ocasión para la primera publicación verdadera y propia, más allá de los pocos dípticos y catálogos que nos quedan.
Con certificado de autenticidad conforme a la ley
La cornice viene adjunta como obsequio.
Envío asegurado
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