René Mels (1909-1977) - Composition abstraite vers 1958





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Artista: René Mels (1909–1977), Bélgica; Título: Composition abstraite vers 1958; Técnica: Acuarela sobre papel; Dimensiones: 48 × 48 cm; Firma: Firmada en la obra; Edición: Original; Año: A finales de los años 1950; País de origen: Bélgica.
Descripción del vendedor
Artista: René Mels (1909–1977) – Bélgica
Composición abstracta
Técnica: obra en papel acuarela
Dimensiones: 48 × 48 cm
Firma: firmada en la obra
Hacia finales de la década de 1950
Estado: Muy buen estado de conservación
Marco: Vendida no encadrada
Descripción de la obra
Esta composición en papel testifica de la plena madurez artística de René Mels.
La obra se construye alrededor de formas geométricas y entrelazadas, organizadas en un espacio deliberadamente aplanado, evocando de manera sugerida el universo de la naturaleza muerta.
Los volúmenes parecen colocados sobre un plano horizontal, como objetos silenciosos, transpuestos a un lenguaje decididamente abstracto.
La paleta cromática, profunda y cálida, combina marrones intensos, verdes apagados, ocres dorados y amarillos brillantes, estructurados por contrastes negros y líneas claras que marcan el ritmo de la superficie. La textura, visible y controlada, confiere a todo un fuerte carácter material, sin perder una gran legibilidad formal.
La obra se distingue por su equilibrio notable entre rigor constructivo y libertad expresiva. Capta la atención por su densidad visual y revela, a medida que se observa, una composición pensada, meditativa, casi arquitectónica.
Conferencia artística
Esta obra puede interpretarse como una naturaleza muerta deconstruida, heredera del cubismo, pero liberada de toda referencia figurativa directa. Los objetos ya no son identificables; subsisten en forma de masas, planos y relaciones cromáticas. El cubismo aquí no es ni analítico ni doctrinal, sino que se integra como una estructura mental, al servicio de una abstracción sensible y poética.
Esta doble lectura — entre abstracción pura y reminiscencia del real — refuerza el interés de la obra y le confiere una profundidad intelectual particularmente apreciada por los coleccionistas.
Contexto e interés de la obra
A finales de los años 1950, René Mels se afirma como una figura singular del abstraccionismo belga de posguerra. Miembro del grupo Art Abstrait y de la Jeune Peinture belge, desarrolla un lenguaje personal, marcado por la contención, el equilibrio y una gran exigencia formal.
Esta obra ilustra perfectamente este período: un momento en el que la pintura de Mels alcanza una síntesis lograda entre construcción, color y emoción contenida. La elección del papel refuerza la intimidad de la pieza y subraya la espontaneidad controlada del gesto.
¿Por qué esta obra es atractiva para un coleccionista?
Obra firmada por un artista reconocido de la abstracción belga.
Formato cuadrado armonioso, fácil de integrar en una colección o un interior.
Período buscado de finales de los años 1950.
Lectura rica: abstracción construida y evocación de naturaleza muerta.
Esta composición abstracta constituye una oportunidad de coleccionar una obra a la vez exigente y accesible, donde René Mels despliega toda la sutileza de su lenguaje pictórico.
Una pieza equilibrada, silenciosa y profunda, representativa de la abstracción europea de la posguerra.
Biografía de René Mels (1909–1977)
René Mels fue una figura importante de la pintura y la grabado belga del siglo XX. Nacido en Herent-lez-Louvain, estudió en la Académie de Leuven, luego en la de Bruselas, y posteriormente se perfeccionó en La Cambre.
Miembro de la Joven Pintura belga y del grupo Arte Abstracto, participó activamente en la modernización de la escena artística de posguerra. Su obra, inicialmente expresionista, evolucionó hacia una abstracción luminosa y estructurada, donde la línea, el color y la luz dialogan con una intensidad poco común.
René Mels fallece en 1977 en Woluwe-Saint-Lambert, dejando una obra de gran coherencia, que combina rigor formal y sensibilidad poética.
Una composición de gran vitalidad, donde René Mels conjuga libertad del gesto, intensidad cromática y elegancia formal — un testimonio valioso de su período figurativo a finales de los años 1940.
Artista: René Mels (1909–1977) – Bélgica
Composición abstracta
Técnica: obra en papel acuarela
Dimensiones: 48 × 48 cm
Firma: firmada en la obra
Hacia finales de la década de 1950
Estado: Muy buen estado de conservación
Marco: Vendida no encadrada
Descripción de la obra
Esta composición en papel testifica de la plena madurez artística de René Mels.
La obra se construye alrededor de formas geométricas y entrelazadas, organizadas en un espacio deliberadamente aplanado, evocando de manera sugerida el universo de la naturaleza muerta.
Los volúmenes parecen colocados sobre un plano horizontal, como objetos silenciosos, transpuestos a un lenguaje decididamente abstracto.
La paleta cromática, profunda y cálida, combina marrones intensos, verdes apagados, ocres dorados y amarillos brillantes, estructurados por contrastes negros y líneas claras que marcan el ritmo de la superficie. La textura, visible y controlada, confiere a todo un fuerte carácter material, sin perder una gran legibilidad formal.
La obra se distingue por su equilibrio notable entre rigor constructivo y libertad expresiva. Capta la atención por su densidad visual y revela, a medida que se observa, una composición pensada, meditativa, casi arquitectónica.
Conferencia artística
Esta obra puede interpretarse como una naturaleza muerta deconstruida, heredera del cubismo, pero liberada de toda referencia figurativa directa. Los objetos ya no son identificables; subsisten en forma de masas, planos y relaciones cromáticas. El cubismo aquí no es ni analítico ni doctrinal, sino que se integra como una estructura mental, al servicio de una abstracción sensible y poética.
Esta doble lectura — entre abstracción pura y reminiscencia del real — refuerza el interés de la obra y le confiere una profundidad intelectual particularmente apreciada por los coleccionistas.
Contexto e interés de la obra
A finales de los años 1950, René Mels se afirma como una figura singular del abstraccionismo belga de posguerra. Miembro del grupo Art Abstrait y de la Jeune Peinture belge, desarrolla un lenguaje personal, marcado por la contención, el equilibrio y una gran exigencia formal.
Esta obra ilustra perfectamente este período: un momento en el que la pintura de Mels alcanza una síntesis lograda entre construcción, color y emoción contenida. La elección del papel refuerza la intimidad de la pieza y subraya la espontaneidad controlada del gesto.
¿Por qué esta obra es atractiva para un coleccionista?
Obra firmada por un artista reconocido de la abstracción belga.
Formato cuadrado armonioso, fácil de integrar en una colección o un interior.
Período buscado de finales de los años 1950.
Lectura rica: abstracción construida y evocación de naturaleza muerta.
Esta composición abstracta constituye una oportunidad de coleccionar una obra a la vez exigente y accesible, donde René Mels despliega toda la sutileza de su lenguaje pictórico.
Una pieza equilibrada, silenciosa y profunda, representativa de la abstracción europea de la posguerra.
Biografía de René Mels (1909–1977)
René Mels fue una figura importante de la pintura y la grabado belga del siglo XX. Nacido en Herent-lez-Louvain, estudió en la Académie de Leuven, luego en la de Bruselas, y posteriormente se perfeccionó en La Cambre.
Miembro de la Joven Pintura belga y del grupo Arte Abstracto, participó activamente en la modernización de la escena artística de posguerra. Su obra, inicialmente expresionista, evolucionó hacia una abstracción luminosa y estructurada, donde la línea, el color y la luz dialogan con una intensidad poco común.
René Mels fallece en 1977 en Woluwe-Saint-Lambert, dejando una obra de gran coherencia, que combina rigor formal y sensibilidad poética.
Una composición de gran vitalidad, donde René Mels conjuga libertad del gesto, intensidad cromática y elegancia formal — un testimonio valioso de su período figurativo a finales de los años 1940.

